Actitudes a evitar por padres y madres tras la separación
ACTITUDES A EVITAR POR PADRES Y MADRES DESPUÉS DE LA SEPARACIÓN • Decir:”¡qué voy a hacer ahora, no sé si podré superar esto!” Estos comentarios ponen de manifiesto los escasos...
El comportamiento social habilidoso es ese conjunto de conductas que emite una persona en un contexto interpersonal para expresar sentimientos, actitudes, deseos, opiniones o derechos de un modo adecuado a la situación. Conlleva el respeto de esas mismas conductas en los demás y generalmente resuelve los problemas inmediatos que surgen en la situación mientras disminuye la probabilidad de problemas futuros.
Muchas personas identifican dificultades en su comunicación social general (iniciar o mantener conversaciones, hacer y aceptar cumplidos, expresar opiniones…) aunque los mayores problemas pueden aparecer cuando la persona no se siente capaz de defender sus derechos en diferentes ámbitos de su vida o ante determinadas personas de su entorno familiar, laboral o social con la consiguiente repercusión personal y sobre la propia autoestima.
La asertividad es la capacidad de autoafirmar los propios derechos sin dejarse manipular y sin manipular a los demás.
La conducta asertiva se basa en aceptar que los propios intereses, objetivos, necesidades, opiniones o deseos son tan válidos como los de las otras personas con las que se interactúa. Esta premisa lleva emparejado un estilo de relación en el que se defienden esos objetivos y deseos de forma directa (sin rodeos), clara (sin segundas intenciones), coherente (palabras, gestos y emociones expresan la misma cosa) y adecuada (con volumen, tono, gestos… respetuosos hacia el otro) teniendo en cuenta los derechos propios y los de los demás.
Las personas con problemas de asertividad presentan con frecuencia conductas de otro tipo:
Estos estilos de comunicación son poco eficaces a la hora de enfrentarse a los conflictos y defender los propios derechos y tienen repercusiones importantes en el largo plazo como pérdida de autoestima, pérdida del aprecio de los demás, falta de respeto o rechazo de los otros y pérdida de libertad.
Ambas conductas, sumisión y agresividad, omiten la existencia de unos derechos no escritos, que ponen a las personas que interactúan en situación de equilibrio. Algunos de estos derechos asertivos son:
Si usted siente que no es capaz de defender sus derechos por sí mismo o ante personas “agresivas” que intentan manipularlo, puede decidir desarrollar una actitud más asertiva aprendiendo estrategias básicas de comunicación como:
AVERTENCIA IMPORTANTE
Si usted tiene alguna duda acerca de los problemas que experimenta o bien acerca de si esos problemas deben ser tratados por un profesional de la psicología, puede ponerse en contacto con nosotros para que un psicólogo de nuestro equipo valore su caso, aclare sus dudas y le oriente al respecto.