Adultos

Los trastornos psicológicos constituyen el problema de salud más extendido en Europa, por delante de las enfermedades cardiovasculares y del cáncer, y su impacto en la calidad de vida de las personas es superior al de enfermedades crónicas como la diabetes, la artritis, las enfermedades respiratorias o las cardíacas.

En el origen y el mantenimiento de los trastornos psicológicos están implicadas, por una parte, variables que forman parte del estilo y los recursos de la persona para enfrentarse a las dificultades en las áreas en las que se desarrolla (personal, familiar, laboral y social) y, por otra, mecanismos inherentes a la propia naturaleza del trastorno (por ejemplo, la conducta de evitación en el mantenimiento de gran parte de los trastornos de ansiedad).

El objetivo de los tratamientos psicológicos es definir, explicar y conocer cómo actúan las variables personales y ambientales y los mecanismos que mantienen el trastorno para que, mediante un plan de intervención estructurado y controlado, se desarrollen estrategias que favorezcan la adaptación personal y la reducción o eliminación del trastorno, lo que redundará en una mejora de la salud y la calidad de vida.

En Beck Psicología tratamos los siguientes trastornos psicológicos en la población adulta: