Ansiedad de separación
Tiene como principal característica la experimentación de ansiedad excesiva ante la separación real o supuesta de las personas con las que el niño ha establecido vinculación afectiva, habitualmente sus familiares...
Se habla de retraso simple del lenguaje cuando en un niño la función lingüística está alterada, porque su desarrollo es lento o su aparición está retardada. Se reduce con el tiempo y responde bien a una intervención: su etapa de mayor desfase es entre los 3-4 años y luego va recuperando la normalidad. Suele tener un buen pronóstico.
Los padres deben conocer los siguientes datos para la derivación a un especialista:
-Si a los 3 años no habla.
-Si no reacciona a los sonidos.
-Si a los 4 años no construye frases o si dice palabras deformadas (sustituciones, omisiones, etc.)
-Si a los 5 años tiene defectos en la pronunciación, salvo la “r” y los grupos consonánticos.
La intervención va dirigida a las siguientes áreas: